Como pasa el tiempo. Ya estamos en agosto. Os dejo con el vídeo de la novela negra de Thomas Rydahl titulada El ermitaño.
SINOPSIS:
En una árida playa de la isla de Fuerteventura aparece, en el maletero de un coche, el cuerpo sin vida de un bebé. No hay restos del conductor, no hay huellas, no hay denuncia, no hay, pues, caso. La policía quiere cerrar la investigación para evitar otro escándalo Madeleine. Pero no cuentan con Erhard, al que todos conocen como «el ermitaño»: tiene setenta años, nueve dedos, lleva casi veinte años de taxista en Fuerteventura, es afinador de pianos en sus ratos libres, un loco del jazz, algo bebedor, vive con dos cabras y, en sus momentos de relax, se sienta en una sillita plegable que lleva en el maletero del taxi a devorar novelas. Es peculiar, solitario, muy observador y tiene un pasado oculto.
Como la policía quiere dar carpetazo al caso sin apenas indagar, Erhard decide tomarse la justicia por su mano y honrar al bebé descubriendo lo que ha sucedido en realidad. El hombre mayor, ya de vuelta de todo, desaparece: ahora Erhard sólo quiere justicia y no se doblegará ante nada ni ante nadie para llegar al fondo de la cuestión.
Hoy martes cuatro de agosto me ha llegado el turno de contaros mis impresiones sobre EO, el libro del que realizamos una lectura conjunta en el mes de Julio.
SINOPSIS:
Entonces lo descubrió: le estaba mirando. Olvidó gritar, escapar o cerrar la boca, abierta por la sorpresa. No pudo apartar los ojos de su visión...». Así comienza la aventura más extraordinaria que un niño y un animal han vivido nunca, una historia de valentía y amistad en la que Pedro, un niño solitario, encuentra un animal escapado del circo y oculta su descubrimiento para conservarlo como amigo. Pero un elefante es un secreto difícil de ocultar... Luis Cerezo escribe un vertiginoso relato en el que un niño afronta una huida del dominio de los adultos y su universo controlado. Una fábula contemporánea que, desde el contraste entre la mezquindad y la ternura, entre la sinrazón y la amistad, entre la cruda realidad y la magia, cambia la forma de ver el mundo.
SU AUTOR: (sacado de http://www.luiscerezo.net/)
1969, Barcelona / Músico, Cineasta y Escritor
Desde muy pequeño escribía historias, y se evadía en juegos imaginarios que reproducía en su entorno visual cercano debido a un trastorno ocular que no fue detectado hasta los diez años.
Comenzó su precoz carrera profesional como batería a los quince años (1985). Dedicado a tocar en orquestas por las noches, al estudio de arte y al boxeo amateur, acostumbraba a participar en las jam sessions de la Cova del Drac, donde conoció a algunos de los grandes músicos de jazz del momento. tiempo después, tras asistir a un concierto de Elvin Jones, decidió abandonar su carrera como intérprete y fundó Bloc Visual (1996), corporación de empresas dedicada a la comunicación.
Inspirado por la revolución del cine digital, vendió sus participaciones en la compañía con la intención de producir su primer largometraje experimental, N@ufragos (2004). Fundó Cinelibre (2006), plataforma de producción alternativa inspirada en el cine de guerrilla, y redactó un manifiesto que promueve la autoría en solitario de guion, dirección, fotografía, música y montaje. Según dichas pautas, filmó tres largometrajes con micropresupuesto, piezas que, junto a su obra documental, han sido estrenadas en Madrid, Montreal, Bogotá, Varsovia y Shanghái.
En 2015 publicó su primera novela, Eo.
OPINIÓN:
Durante gran parte de mi vida profesional he trabajado como profesora particular (clases de apoyo, privadas, etc). Y gracias a todos esos maravillosos niños y niñas con los que he tenido el placer de interactuar (yo les enseño, pero también aprendo) he comprendido que no todos los que llaman la atención a gritos (dícese de los que se portan mal, sacan malas notas, pasan de todo), son malos. Tan sólo necesitan atención que no reciben (de los padres, de los hermanos, de los abuelos). Quieren a alguien que les escuche y que no se tomen sus problemas a la ligera, aunque a nosotros nos parezcan nimiedades. Y quieren sentirse escuchados. Pero escuchados de verdad. No les gusta sentir que hablan con la pared y los adultos les decimos "Sí, sí" sin tener muy claro a qué. Quieren ser parte activa de su entorno y en ocasiones no lo consiguen.
Esto es más o menos lo que le pasa a Pedro, el protagonista de EO. Pedro es un niño retraído, situación que se ve agravada cuando su padre se marchó de casa. Susana, su madre necesita trabajar y muy duro para sacarlo adelante. Es camarera en un restaurante de comida rápida y en más de una ocasión debe hacer turno doble. Casi no ve a su hijo pues se levanta temprano para ir al trabajo y no le da tiempo a ir a casa a la hora de la comida. Antes de marcharse le deja notas a Pedro para que sepa qué debe hacer (dónde está la comida y cómo calentarla, hacer los deberes, a qué hora acostarse, etc). Como veis, Pedro es un niño de diez años que pasa demasiado tiempo solo y al que le gustaría que su madre pasara más tiempo con él y que por supuesto tuviera tiempo para dedicarle.
Pedro no tiene amigos. Sólo habla en el colegio con Hugo, su compañero de pupitre. Pero no puede tener grandes conversaciones porque Hugo sufre el síndrome de Asperger "que hacía que, a pesar de ser listísimo, distrajera su atención en cosas extrañas tales como contar árboles o aprenderse los códigos de barras de todos los productos que caían en sus manos". Por si no fuera poco, Pedro no duerme bien, se despierta a medianoche y en el colegio no rinde los suficiente. Le llaman despistado, idiota y cosas peores, y sufre acoso escolar (ahora muy conocido como bullying) especialmente de Gonzalo un niño grandote que la ha tomado con él.
Así que tenemos a un joven protagonista solitario y triste que miente continuamente para no afrontar la realidad. Pero no por ello deja de ser un niño de diez años, con sus ilusiones.
"A Pedro le hubiese gustado dejar de ser el niño con peor suerte del mundo, no tener miedo a hundirse en el agua y ser tan audaz como el cazador de piratas Zoro, que soñaba con convertirse en el mejor y más poderoso espadachín del mundo"
Por otra parte tenemos a un elefante que milagrosamente sabe estar escondido y en silencio, al que Pedro encontrará y cuidará de la mejor manera que se le ocurrirá, teniendo en cuenta su corta edad y que no tiene con quién consultar sus dudas. Su relación será de confianza y lealtad.
Eo es una historia que se desarrolla en Mérida. El libro cuenta con 304 páginas divididas en 36 capítulos cortos contados por una narrador omnisciente. La letra es muy grande, así que se lee muy rápido. Su prosa es una delicia: suave, encantadora, embriagadora y a la vez fresca, con un estilo muy natural, ágil y juvenil, siempre contado desde la perspectiva de Pedro.
Siendo sincera debo decir que este libro no es lo que yo esperaba. Es una historia diferente a la que me había planteado incluso antes de empezar a leer. La portada me daba la sensación de que nuestros protagonistas (Pedro y el elefante) disfrutarían de libertad, de diversión, de empatía, cariño, amistad y de no poder pasar el uno sin el otro. Imaginaba que Pedro era el mejor amigo del elefante y viceversa, que su relación era la que todos mantenemos con nuestras mascotas sean del tamaño que sean. Pero no es así.
Desde mi punto de vista el elefante es algo a lo que se aferra Pedro con tal de salir de esa vida tan insustancial y vacía que lleva día tras día. Es más una dependencia y una necesidad que un amigo. Y eso no me ha terminado de convencer. Por otra parte nos habla de ciertas cosas y no entiendo muy bien el motivo, porque el autor se queda en la superficie (como es el caso de los mejores payasos del mundo Bonaparte y Don Pepino, o de su amigo Hugo y su enfermedad) y creo que podrían haber dado mucho más juego a la historia.
¿Me ha gustado? Es difícil decirlo. EO nos habla de las redes sociales y el poder que tienen (velocidad, credibilidad, fama momentánea), toca el tema del bullying, la crisis, la desorganización familiar, la imposibilidad de compatibilizar adecuadamente trabajo y familia, etc. Y es indudable que estos son temas importantes en nuestra sociedad. La historia no está mal, aunque el final no me ha gustado. Además como digo no es lo que esperaba. Creía que iba a ser un cuento donde los finales son siempre felices.
Lo único que he podido ratificar es algo que ya pensaba. Los niños necesitan tiempo para jugar, tiempo con los adultos que les indiquen el camino a seguir, que sean un modelo para ellos. Y, por descontado, tiempo y espacio para vivir y disfrutar.
"Bastaba que cada uno buscara su propio camino para encontrar sorpresas maravillosas"
¿Habéis leído algo de Laura Norton? Yo me quedé con la espinita de su primera novela No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas, y me he animado con su segunda obra: Gente que viene y Bah. Y os digo que es una obra imprescindible para divertirse, reír y alegrar nuestras vidas.
SINOPSIS:
¿Cuántas probabilidades hay de que te toque el gordo de la lotería? ¿O de que el chico con el que estás a punto de casarte se líe con la presentadora más guapa de la tele la misma semana en la que además pierdes el trabajo?
A Bea le acaba de pasar (excepto lo de la lotería); así que decide huir y refugiarse en la casa de su excéntrica familia buscando un poco de paz, aunque acabará trayendo el caos a la vida de todos. Bea es así. En esta novela vas a encontrar un mercedes rosa, una casa en los árboles, un pelirrojo de caerse de espaldas (literalmente), muchas risas y unas cuantas lágrimas de esas que se lloran a gusto, que te liberan y te reconcilian con la vida. Una historia con la que descubrirás que siempre hay algo bueno esperándote a la vuelta de la esquina. Si sabes verlo. Y si no la cagas.
SU AUTORA:
Laura Norton inició en 2014 una exitosa carrera literaria con su primer título No culpes al karma de lo que te pasa por gilipollas, un libro con el que ha conseguido ganarse el favor de decenas de miles de lectores y del que ya se está preparando su adaptación al cine.
OPINIÓN:
No sabía muy bien cómo comenzar esta reseña. Quería transmitiros fielmente todo lo que he sentido con ella y no me salían las palabras. Ha tenido que ser hoy, el día en el que he visto a una chica con Síndrome de Down viniendo de la playa con su familia, para que me salgan solas. Para los que no estéis familiarizados con esta enfermedad sólo os digo que son personas muy cariñosas, sensibles y sinceras. Ellas siempre te van a querer y nunca te van a engañar. Pues bien, como os decía hoy he visto a esta chica riendo. Ha sido una risa fresca, alegre y sincera como la de un niño, una risa contagiosa que incluso yo estando en la otra acera he sonreído tan sólo de verla reír. Es una risa que sale de forma espontánea de su interior y que te hace sentirte bien. Esto es precisamente lo que he sentido al leer Gente que viene y bah: frescura, ilusión, alegría, bienestar.
Gente que viene y bah nos presenta a Bea, una protagonista desquiciada a ratos. Trabaja como arquitecta en un estudio de arquitectura, a la sombra de su novio a pesar de ser ella la que hace la mayor parte del trabajo, de la que salen las ideas, la que pone más entusiasmo. Pero su novio tiene mucha labia, y es capaz de meterse en el bolsillo a quien haga falta. Es gracias a él que los proyectos de Beatriz cobran vida. Son una especie de complemento. Ella aporta las ideas y él hace la parte de marketing y relaciones públicas.
Hay un refrán que dice "A perro flaco, todo son pulgas". ¿Lo conocéis? Pues bien con esta mujer tenemos un claro ejemplo.
Llegará un día en el que, por razones que ya conoceréis, Víctor (el novio) acaba besando a otra mujer, una presentadora de televisión, y Bea les pillará. Además se enterará de que van a despedirla en breve, así que se lía la manta a la cabeza y decide ir al pueblo, a casa de sus padres, a refugiarse y llorar sus penas sin que nadie la moleste y pensar con tranquilidad qué le deparará el futuro.
Laura Norton nos cuenta esta historia en primera persona, lo que da la sensación de que es la misma Beatriz la que te lo cuenta. Es como un monólogo, y te imaginas que ella está presente ahí delante y te está contando lo que le ocurre. Te ves en el escenario en el que ella actúa. Y es que el tono en el que la autora nos cuenta la historia te hace vivir todas las aventuras, te hace sentir uno más de la familia, tú eres Bea y lo que le pasa a ella te está pasando a ti, y eres tú la que reacciona de esa manera tan peculiar, tan diferente, tan BAH.
"Muchas veces necesitas irte de los sitios para apreciarlos en lo que valen. Somos así de lerdos"
Además me he identificado mucho con la protagonista, con esos prontos que sólo ella puede tener, con esas circunstancias tan especiales que la rodean. Y es que Bea es una chica muy impulsiva y sus reacciones ante lo que le ocurre en la vida son fantásticas. Destaco de ella ese ímpetu, ese tesón, esa fuerza, esa determinación y esfuerzo, ese toro de miura que lleva dentro y que ataca allá donde ve algo rojo... :-)
Su familia no tiene desperdicio. Son un encanto, pero a cada cual más peculiar, extravagante y raro. Les coges cariño a todos. Son unos personajes con una personalidad muy definida y Laura Norton consigue que sean muy creíbles todos y cada uno de ellos. Creo que la autora en este aspecto ha hecho un gran trabajo.
Hasta que no leáis el libro no podréis saber lo que es el "fabari" de León, el hermano de la protagonista, pero os puedo jurar que no puedo parar de reír tan sólo de recordar la escena en la que la madre se entera.
El lenguaje que usa la autora es sencillo pero bien pensado. La narración es ligera, fresca, divertida, amena. Las páginas pasan volando una detrás de otra y sin darte cuenta casi has ventilado cien páginas en un momento.
Gente que viene y bah comienza muy fuerte tocando el tema humor y luego se va suavizando y abordando el romanticismo. Es decir, el humor va de más a menos y el amor de menos a más. Está muy compensado.
¿Habéis tenido alguna vez la sensación de querer leer algo pero no saber dónde encontrarlo? Yo muchas veces he deseado leer algo que me hiciera reír. Muchas veces me he encontrado con novelas cuyas historias arrancan una leve sonrisa de mis labios, otras que me parecen simpáticas, y otras de agradable lectura. Pero no son lo que buscaba. He leído comentarios sobre si Laura Norton es autor o autora. A mí sinceramente me da igual. Lo que realmente me importa es que ha sabido conectar conmigo, que me ha hecho reír aún cuando quería aguantarme las ganas y no lo he podido evitar, cuando he pensado que la gente iba a creer que estaba loca mientras en la peluquería sentada leía un libro y no paraba de reír, sola, a carcajada limpia y que cada vez que pienso en Bea me levanta el ánimo.
He leído una noticia en este enlace en la que nos comentan que también esta obra, al igual que su anterior, será llevada a la gran pantalla gracias a la compra de los derechos que ha ejercido la productora Zeta Cinema sobre el libro. Y me alegro porque creo que se lo merece. Es una novela cuyos personajes te dejan un buen recuerdo tanto de ellos como de sus alocadas vivencias.
No suelo releer los libros. Lo he hecho en contadas ocasiones (Víctimas de Dean R. Koontz, la trilogía de La cazadora de sueños de Lisa McMann y Sin noticias de Gurb de Eduardo Mendoza). Y puedo aseguraros que Gente que viene y Bah se une a la lista. Y es que Gente que viene y Bah es un libro para releer. Me he reído mucho y bien. Me ha cargado de energía, me ha alegrado los días de su lectura, me ha levantado el ánimo, me ha hecho sentirme viva.
Un consejo: si te da vergüenza que te vean riendo sola mientras lees, no lo hagas en la calle, el tren, el autobús o en la peluquería, porque no podrás evitarlo.
¿Os la he recomendado? Pues a por ella: compradla, buscadla en las bibliotecas, pedídsela a vuestros amigos, pero LEEDLA. Yo la tengo guardada para una segunda lectura, porque las ganas de reír no deben faltar nunca.
"Lo malo siempre llega antes de lo que quieres, porque no querrías que llegara nunca"
Os dejo con el vídeo de un libro que he disfrutado muchísimo. Con él he reído a carcajadas sin poder remediarlo. Se trata de Gente que viene y bah de Laura Norton.
SINOPSIS:
¿Cuántas probabilidades hay de que te toque el gordo de la lotería? ¿O de que el chico con el que estás a punto de casarte se líe con la presentadora más guapa de la tele la misma semana en la que además pierdes el trabajo?A Bea le acaba de pasar (excepto lo de la lotería); así que decide huir y refugiarse en la casa de su excéntrica familia buscando un poco de paz, aunque acabará trayendo el caos a la vida de todos. Bea es así. En esta novela vas a encontrar un mercedes rosa, una casa en los árboles, un pelirrojo de caerse de espaldas (literalmente), muchas risas y unas cuantas lágrimas de esas que se lloran a gusto, que te liberan y te reconcilian con la vida. Una historia con la que descubrirás que siempre hay algo bueno esperándote a la vuelta de la esquina. Si sabes verlo. Y si no la cagas.
La semana pasada os mostraba un libro de la editorial Algón que me había llegado a casa. Lo que no os había contado es que no llegó solo. Le hacía compañía este otro: Neurogénesis de Lluvia Beltrán, autora con la que aún no me he estrenado.
SINOPSIS:
'Me miro al espejo y no consigo recordar quién es esa mujer que me observa. ¿Cómo he llegado hasta aquí?, ¿cuál es mi historia?, ¿por qué no consigo deshacerme de este maldito dolor de cabeza?' Muchas preguntas sin responder en una sociedad decrépita y desesperanzada. Un gobierno con mucho que ocultar. Un hombre que lucha contra sus propios demonios y no quiere olvidar, y una mujer con mucha fuerza y ganas de recordar. Pasado y presente son piezas clave en esta novela distópica que nos muestra un futuro enfermo demasiado real.
Me gusta lo bueno de la vida: leer, dormir, soñar, escuchar música, reír,...
Puedes contactar conmigo
1) Por email: BlogElSalonDelLibro ARROBA gmail.com
2) En Facebook:
https://www.facebook.com/ElSalonDelLibro
3) En Twitter: @elsalondellibro
4) En Instagram: https://www.instagram.com/elsalondellibro/